Señor: Te adoro reconociendo de que Tú dominas sobre todo y que de Ti proceden las riquezas, la gloria y que en Ti está la fuerza, el poder y el dar grandeza a todos. (1 Crónicas 29:12). Reconozco que Tú eres mi fuente de bendición. Estoy agradecido por todo lo que hiciste y me has dado en estos meses, es tanto que me cuesta enumerar todas las bendiciones recibidas.

Con esa gratitud en el corazón -destacando que eres un Padre fiel y proveedor- te pido perdón porque nunca estoy satisfecho con todo lo que tengo (Proverbios 27:20); libra mi alma de avaricia y hazme recordar que como Jesús dijo: la vida no consiste en la abundancia de los bienes que poseo (San Lucas 12:15). Que como enseñó Pablo sepa contentarme cualquiera sea la situación en la que me encuentre y a estar feliz teniendo poco o mucho (Filipenses 4:11) con Tu bendición.

Padre: líbrame de la tentación de gastar de más, de comprar cosas innecesarias; afirmo que tengo el poder para resistir a la tentación y escapar de ella (1 Corintios 10:13); Tú eres fiel, yo podré soportar y hallar la salida. ¡Gracias por la victoria! Me gozo al saber que Tú, Padre, suplicarás todas mis necesidades conforme a Tus riquezas en gloria en Cristo Jesús (Filipenses 4.19), llegaré a fin de mes, no tendré falta de ningún bien. Tú eres mi amparo y fortaleza, mi pronto auxilio en las tribulaciones (Salmos 46:1), por eso en este momento te ruego que des vuelta esta situación económica que quiere afligirme. Y así como le dijiste a Tus discípulos que hacían el negocio de la pesca que tiren de nuevo las redes para pescar luego de sus fracasos, dame instrucciones y Tu palabra para que experimente una bendición que 'rompa la red' (San Lucas 5:4-7). No me apoyo en mi corazón, en mi prudencia, sino en Ti y Tu Palabra.

Declaro que Tú me bendices en el Día del Trabajador y que hallaré puertas abiertas, Tu favor va delante de mí acomodando todo, corriendo todo obstáculo, levantando todo valle; veré que Tú edificas un camino de prosperidad y bendición para mi vida y podré testificar de Tu poder, fidelidad y favor. En el Nombre de Jesús. Amén y amén.
Rvdo. Omar Cabrera Jr.