Las cosas buenas de la vida

"Pues me dio vergüenza pedirle al rey soldados de caballería para que nos protegieran del enemigo en el camino, ya que le habíamos dicho al rey que Dios protege a todos los que le buscan, pero que descarga su fuerza y su ira sobre todos los que le abandonan." Esdras 8:22


El título de la meditación de hoy suena como el de un libro de autoayuda, que promete fama, riqueza y prestigio si tú sigues diez pasos sencillos. Pero DIOS define a las cosas buenas de una manera totalmente diferente, que sólo se consiguen buscándolo a ÉL. Cuando hacemos del Señor la prioridad absoluta de nuestra vida, podemos esperar las bendiciones de:

Una estrecha relación de amor. Quienes buscan a DIOS con pasión aprenden a conocerle genuinamente, y experimentan un sentimiento de unidad con ÉL. El Señor no es ya una deidad distante, sino un amigo íntimo. Y a medida que crezca tu consagración, sentirás un amor que trasciende a cualquier relación humana.

Satisfacción. El vacío que hay en todo corazón puede ser llenado únicamente por el Señor. Toda la búsqueda terrenal de placer o propósito palidece en comparación con la satisfacción de Su presencia.

Gozo. Cuando buscas con afán al Señor se convierta en la prioridad de tu vida, encontrarás un gozo que nada ni nadie podrá quitarte. Los sufrimientos y las dificultades no te destruirán, porque verás todo desde la perspectiva del Señor.

La ayuda de DIOS. Como dice el versículo de hoy, Dios protege a todos los que le buscan. De hecho, ÉL se complace en ayudar y suplir tus necesidades.


¿Qué ocupa la prioridad en tu vida? Aquello en lo que piensas y revela tus verdaderas prioridades.
Si tú puedes pasar el día sin pensar en DIOS es porque no lo estás buscando fervientemente. Pero, si el Señor es la delicia de tu vida, tú no podrás olvidarte de ÉL.