Se dice que en cierta ocasión hubo una gran inundación en un pueblo. Un periodista fue enviado al lugar del desastre y encontró a una mujer que estaba sentada en el techo de casa, mientras muchas cosas flotaban a su alrededor. Después de estar allí un rato, reportero notó que había un sombrero flotando frente a la casa, que después de moverse 15 metros en una dirección, se movía en dirección contraria y después de recorrer otros 15 metros volvía en la otra dirección. Lo estuvo observando y vio que lo hizo como siete veces. Finalmente el reportero dijo: Señora ¿Tiene alguna idea de lo que sucede con ese sombrero? Ella respondió, "Ese es el loco de mi esposo, que dijo que iba a cortar la grama así lloviera o se inundara".
El problema que tenemos hoy en día es que muchos de nosotros nos mantenemos enfocados en la grama, mientras la casa está completamente inundada.
Todos necesitamos de restauración. Los pasos son los mismos sin importar cual es el problema o cual es la herida, la adicción o el hábito. Vimos que la raíz de todo esto es mi deseo de controlar todo. Entre ¡más insegura es la persona más quiere controlar. Quiere controlar su vida, la vida de otros y su ambiente, en otras palabras quiere ser Dios, quiere ser el centro del universo. Cuando tratamos de controlar todo terminamos con fatiga frustración y fracaso.
Nosotros no cambiamos cuando tenemos luz, cambiamos cuando sentimos el calor. No cambiamos hasta que el dolor sobrepasa el temor al cambio. La mayoría de la gente raramente da el paso hacia la restauración, hasta que se ven forzados a hacerlo, porque no les queda otra opción.
Dios usa tres formas para acabar con la negación, son cosas que llaman nuestra tensión, que nos fuerzan a movernos hacía la restauración de aquellas cosas que han arruinado nuestras vidas.
CRISIS: Enfermedad, stress, perdida del trabajo, separación, etc.
CONFRONTACIÓN: Aparece alguien que le ama lo suficiente para confrontarlo en verdad y amor, y le dice: "Estas perdido, estas perdiendo tu familia, estas perdiendo la salud y vas a perder tu trabajo". Tal vez son varios los que le han confrontado. Hay un dicho en Texas: "Si alguien te dice que tienes cara de caballo, no le prestes atención; si dos te dicen que tienes cara de caballo, mírate en el espejo; si tres te dicen que tienes cara de caballo, cómprate una silla de montar". El dolor es como una alarma contra incendios. Si se activa, le está advirtiendo que algo anda mal en su vida. Si usted tiene una alarma contra incendios en su casa y de repente esta se activa, ¿Que haría Ud.? "Le tiraría una piedra y le gritaría, ¡ya cállese!". Yo creo que nadie hace eso. Pero a menudo en nuestra vida, cuando la alarma del dolor se activa, en lugar de buscar la causa, simplemente tratamos de cubrir el sonido con algo. Muchos lo cubren con comida, alcohol, drogas, sexo, otras relaciones y muchas otras cosas más. Pero nada de esto lo soluciona. Dios usa el dolor para tratar de llamar nuestra atención.
CATASTROFE: Yo espero que no tenga que llegar a esto en su vida. Cuando el piso se hunde: Física, emocional, espiritual, relacional y financieramente, cuando tocamos el fondo; lo que sucede a menudo es que Dios da un paso atrás y deja que sintamos el impacto total producto de nuestras necias decisiones. "¿Ud. quiere ser Dios? Está bien". Así que Él da un paso hacia atrás y deja que Ud. sea Dios. Entonces Ud. cosecha lo que sembró y siente el impacto total, causándole una catástrofe en su vida.
El Segundo Paso lo llamamos el paso de la ESPERANZA.
El Primer Paso dice: Lo admito, no tengo ayuda, no tengo poder. El Segundo Paso dice: Hay un poder, hay una buena noticia. Ese poder le puede impulsar para manejar las cosas que no ha podido manejar por sí solo.
CREO FERVOROSAMENTE QUE DIOS EXISTE, QUE SOY MUY IMPORTANTE PARA ELY QUE EL TIENE EL PODER PARA AYUDARME EN Mi RESTAURACIÓN. Hebreos 11:6 nos dice: Porque es necesario que el que se acerca a Díos crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.
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